sábado, 23 de agosto de 2014

El rostro solidario de las ONGs



A partir del triunfo de la revolución cubana, en el movimiento obrero, campesino y estudiantil de América latina, creció el fervor revolucionario en pro de una auténtica liberación y soberanía de los pueblos para mejorar sus condiciones de vida.
El bondadoso sistema capitalista desde EE-UU trazó una serie de “programas de solidaridad” dirigido hacia los sectores populares que en medio de la riqueza de sus recursos naturales se empobrecía cada vez más.
Uno de esos programas, fue “Alianza para el progreso” que entre los años sesenta y setenta del siglo pasado, tuvo la verdadera misión de contrarrestar la influencia de la revolución cubana en los pueblos latinoamericanos y apoyar las medidas reformistas que sus lacayos de turno llevarían a cabo. Medidas como,  una reforma agraria en función de la productividad agrícola, fomento del libre comercio entre los países, modernización de las vías de comunicación, acceso a la vivienda, salud y educación, entre otras; pero siempre sin lesionar los intereses transnacionales y el modelo neoliberal.
De alguna manera diríamos, que “Alianza para el Progreso” cumplió con el objetivo de detener la lucha popular de nuestros pueblos. Hoy son las ONGs, como la USAID, las encargadas de continuar con la tarea.
En nuestro país, a partir de 1978-1980 en los períodos de elecciones, los “líderes y activistas progresistas” de ONGs se unen para apoyar las campañas de candidatos abiertamente partidarios del neoliberalismo; obviamente, más allá de esperar que tras el triunfo puedan recibir puestos dentro del nuevo gobierno, su primordial tarea es la de utilizar su experiencia organizacional y discurso progresista para controlar el reclamo popular.
En general las ONG se convirtieron en "el rostro solidario" del neoliberalismo y se comprometieron  íntimamente con las clases dominantes para apoyar su labor de adormecimiento. En la práctica, de los miles y miles de dólares que el imperio abona a las ONGs, “menos del 18% llega a los supuestos beneficiarios”, porque el resto sirve para financiar infraestructura, los salarios de la burocracia de clase media que vive de la “cooperación” y para quebrantar la lucha y unidad de los movimientos sociales de izquierda.

sábado, 16 de agosto de 2014

MARTA HARNECKER: Hacia una nueva cultura de la izquierda



Martha Harnecker, escritora, socióloga y periodista chilena, ganadora del Premio Libertador al Pensamiento Crítico por su obra: Un mundo a construir, es una activa militante de la justicia social y del antiimperialismo, que en los últimos años se ha convertido en referencia de la izquierda marxista.

Martha Harnecker es una convencida defensora de la revolución cubana, de la revolución bolivariana, ha publicado también los libros Hugo Chávez Frías: un hombre, un pueblo; Venezuela: militares junto al pueblo; y Venezuela: una revolución sui generis.

Martha Harnecker, considera que la izquierda debe promover una nueva cultura pluralista y tolerante "que ponga por encima lo que nos une y deje de un lado lo que nos divide, que promueva la unidad entorno a valores como el humanismo, la solidaridad, el respeto a las diferencias, el amor y la defensa por la naturaleza" y que a la par se rechace el afán por el lucro y las leyes del mercado como principios rectores de la actividad humana.

Martha Harnecker,  enfatiza que "la radicalidad no está en levantar consignas más fuertes, ni en realizar las acciones más radicales que solo unos pocos entienden y muchos se asustan, sino en ser capaces de crear espacios de encuentro y de lucha de amplios sectores, que sea capaz de constatar que somos muchos en la misma lucha y eso es lo que nos hace fuertes, nos une y hace ser radicales".

Refiriéndose al panorama actual ecuatoriano, expresa que es “una de las experiencias de cambio social más significativas de América Latina”, y agrega que los sectores populares y progresistas deben apoyarla, pero con una nueva cultura política que detenga los intentos de “recolonización y disciplinamiento” emprendidos por el imperialismo en nuestro país.

En efecto, una nueva cultura de la izquierda, debe dejar de vanagloriarse culpando a los otros por los errores del pasado. Debe dejar de llenarse la boca hablando de democracia cuando lo único que defienden son intereses sectarios. Debe dejar de imponer su pensamiento a los demás. Hoy se quiere más de acciones programáticas que promuevan la solidaridad, la movilización e iniciativa populares para construir una patria digna y soberana.

viernes, 1 de agosto de 2014

La Casa de la Cultura Ecuatoriana...



Desde Agosto de 1979, La casa de la Cultura Ecuatoriana lleva el nombre del inigualable escritor y político lojano Benjamín Carrión, gestor de su creación y fundación. Ésta nace hace setenta años al calor de la “Revolución del 28 de Mayo de 1944”, en la que, con la idea de “defender la patria” y “de la nación pequeña pero culta” confluyeron personajes de todo color, comunistas, socialistas, conservadores, liberales e “independientes”.
Aunque no es el momento para recordar a Benjamín Carrión, es necesario resaltar brevemente su figura pública de tendencia socialista, por tanto comprometido luchador con la erradicación de las dramáticas situaciones de los sectores populares y con la defensa del desarrollo de los pueblos olvidados por la inacción estatal de los gobiernos de turno. Pedro Saad, contemporáneo de nuestro coterráneo comento que Benjamín Carrión a la edad de 15 años compartió plenamente las ideas alfaristas, además fue pública su posición antimperialista y su adhesión a la revolución cubana.
La Casa de la Cultura Ecuatoriana no ha estado exenta del centralismo, del oportunismo, del regionalismo y otras apetencias politiqueras… A los lojanos nos cabe el orgullo de otro lojano haya sido su presidente, me refiero al connotado escritor Dr. Estalin Alvear.
En el caso de la Casa de la Cultura Núcleo de Loja, sus presidentes, unos más, otros un poco más, pero en fin, todos han volcado sus esfuerzos por impulsar el desarrollo y apoya a la cultura lojana y de la región sur.
El Dr. Félix Paladines, político, escritor e investigador es el actual Presidente del Núcleo de Loja, debo recordar y destacar que entre sus proyectos estaba la creación de un corredor cultural, en el que incluía las casas que habitaron personalidades del arte y la cultura como el propio Benjamín Carrión, Pablo Palacio y Eduardo Kingman, cuyas edificaciones se pretende reconstruirlas para conservarlas como patrimonio cultural de los lojanos.
Al celebrar este nuevo aniversario de fundación, este proyecto, sin descuidar la importante actividad que se viene desarrollando, debería impulsarse con el apoyo de las autoridades locales y nacionales, pero en especial por la municipalidad y ciudadanía lojana.

viernes, 25 de julio de 2014

El rostro de la derecha



Un partido político es un grupo de personas que dicen practicar un mismo ideario político. La historia en todo el mundo nos da cuenta de la existencia de partidos políticos de derecha y de izquierda. El aparecimiento de partidos o movimientos políticos de centro e independientes no existe; es un espejismo, un eufemismo creado por el neoliberalismo para detener el avance de los pueblos en su camino hacia la emancipación.
Los partidos de derecha habitualmente están integrados por personas de clase socioeconómica alta, que desde posiciones conservadoras luchan por la defensa de sus intereses y la propiedad privada, para ello aluden a ofertas de mejoramiento a los sectores de la clase media y de ayudas misericordiosas a los sectores más pobres. Tienen una facilidad increíble para cambiar de denominación y usar eslóganes populares como el de “pan techo y empleo”, “otro Ecuador es posible”, cuando en la práctica son sectores reaccionarios que en complicidad de empresarios, banqueros, transnacionales e incluso de la embajada “yoni”  financian campañas por “amor a la patria”, en su afán de consolidar el modelo de saqueo y sobreexplotación del trabajo, de inequidad e injusticia social, cuyos resultados están a la vista: concentración de la riqueza en pocas manos, expansión de la pobreza y exclusión social para las mayorías populares.
En todos los pueblos del mundo, la derecha necesita garantizar su continuidad en el Poder e impedir las victorias populares ya sea mediante levantamientos o vía de elecciones. Para ello, llevado por el pánico que les causa el crecimiento de las organizaciones populares, no vacilan jamás en reforzar sus características autoritarias, represivas y cínicas. La democracia representativa que defienden se contradice con la persecución a todo aquel que se opone al pensamiento oficial.
Queda por tanto como tarea revolucionaria a los partidos de izquierda, que junto a los trabajadores, campesinos, maestros y sectores populares, tenemos la responsabilidad de organizar la resistencia y lucha conjunta para persistir en el derecho a la resistencia en defensa de la soberanía y el buen vivir.

viernes, 18 de julio de 2014

Partidos políticos o club de socios con derechos reservados


La semana anterior el Consejo Nacional Electoral aprobó la eliminación del registro electoral del PRIAN, PRE, MPD y Ruptura, argumentando que no cumplieron con los requisitos que señala el Código de la Democracia. Acto seguido, los dirigentes de estas agrupaciones iniciaron acciones legales para apelar tales decisiones, según manifestaron porque éstas no se “apegan a derecho” o son “aberraciones políticas por estar en la oposición”; y que más allá del fallo, ellos “seguirán en la palestra política defendiendo los derechos”; no sé, si los suyos o los de los de la ciudadanía.

El hecho cierto es que, las cuatro organizaciones ya no podrán contar con los derechos políticos que contempla la Constitución y el propio órgano electoral, y consecuentemente no dispondrán de los beneficios económicos estimados en algo más de 9 millones de dólares.

Debe reflexionarse en el hecho de que el simple cumplimiento o no de ciertos requisitos, no debe ser el factor determinante para la existencia de tal o cual partido o movimiento político. Lo importante debe ser evaluar el grado de vinculación de estos con las masas y su influencia en el diagnóstico y propuestas de alternativas de solución a la problemática social y nacional, a partir de acciones de educación y formación política que generen a su vez una auténtica democracia interna.
Quizá las decisiones del CNE resulten una medida de endurecimiento que afecte al sistema de representación popular, pero éstas no evitarán que ciertas agrupaciones que “a leguas” no gozan del respaldo popular, sigan siendo una especie de club de socios con derechos reservados que se hacen respaldar de un grupo de fanáticos llenos de esperanzas postergadas
Finalmente, las agrupaciones políticas que aún constan en el registro electoral, ni remotamente representan la pluralidad política y mucho menos son el reflejo de verdaderas alternativas organizativas para los ecuatorianos, porque algunas han sido paridas de otras por la pérdida de prestigio, por el oportunismo o porque sus dirigentes han hipotecado el acumulado histórico de lucha que los sectores populares han pagado con sus vidas.

viernes, 11 de julio de 2014

A propósito de las pruebas “Ser Ecuador”



Desde 1996 se vienen realizando evaluaciones a los estudiantes, antes se denominaron pruebas “APRENDO”, hoy pruebas “Ser Ecuador”. Lo cierto es que unas y otras son adaptaciones de las pruebas PISA, evaluaciones impuestas desde el año 2000 por la OCDE, organismo no de carácter educativo sino económico dependiente del Banco Mundial.
Nadie podría decir que los resultados de estas evaluaciones no sirven. Pero éstas no nos indicarán dónde están los problemas del proceso de enseñanza y aprendizaje, tampoco nos enseñará cómo está nuestro diseño curricular; es decir, no son instrumentos eficaces para medir efectivamente la problemática educativa. Para el INEVAL las pruebas “no miden conocimientos sino las destrezas y habilidades que deben tener nuestros estudiantes”, respecto de estudiantes de otras escuelas o localidades.  Sin embargo, más allá de los resultados, lo malo de éstos, radica en que se pretenda ocultarlos para echar la culpa de la mala calidad de la educación, a los profesores y a la UNE.
Desde luego estos resultados le sirven a la OCDE, que funciona como una “agencia acreditadora” que busca homogenizar la educación y detectar cuál es el nivel de preparación de los chicos en las próximas décadas, entiéndase de la mano de obra que necesitarán las transnacionales, a partir de los cuales, condicionan el cumplimiento de “recomendaciones” previo al otorgamiento de “ayudas”.
Debe quedar claro, que mientras se siga tratando a la educación como una mercancía, va a haber una educación buena, regular y mala. Entonces, si se analiza desde el lado de las escuelas privadas, exceptuándose unas pocas y desde luego muy caras, son relativamente muy buenas; pero lo que abunda son las escuelas  de “garaje”, también costosas pero mediocres.
En cuanto a la educación pública, sin duda hay falencias, pero la evaluación que se aplica no sirve para determinar el verdadero estado de la educación menos aún para saber el grado de conocimiento de los estudiantes.
Queda entonces, forjar la unidad de todos los actores sociales, para demandar del Gobierno la responsabilidad ineludible e inexcusable para garantizar “una educación pública laica en todos sus niveles, y gratuita hasta el tercer nivel de educación superior inclusive”.