jueves, 25 de mayo de 2017

Escuela Miguel Riofrío, símbolo de la heredad laica e intelectual


La escuela de educación básica Miguel Riofrío, se apresta a celebrar 122 años de fundación, hecho ocurrido el 5 de junio de 1895. La escuela nace en medio de los hechos heroicos de la revolución liberal y su nombre es en homenaje a una de las figuras más preclaras de la historia ecuatoriana.
Miguel Riofrío, es uno de los hombres más destacados de Loja y del país, por su accionar en el periodismo, la diplomacia y la política, adquiere dimensiones universales. Es autor de la primera novela ecuatoriana, “la Emancipada”, letras en las que más allá de la narración romántica, es una descripción de la realidad social de la Loja de aquellos días.
La escuela Miguel Riofrío, nace pues, en un tiempo y un espacio henchido de la lucha libertaria, era la semilla que caía en suelo fertilizado con los fondos provenientes del legado benéfico del Dr. Bernardo Valdivieso; en sus aulas junto a las primeras letras y números se enseña humanidades y filosofía. Esto fue una muestra de que se trató de una escuela fundada para enseñar a pensar, a reflexionar, a amar la libertad. Esta es la piedra angular en la que se sostienen los principios institucionales, la escuela rápidamente se convirtió en el símbolo institucional de la defensa de los derechos civiles y de la excelencia educativa en el sur del país, es por eso que, en el siglo pasado se le conocía como el “Bernardo Chiquito”.
Personajes de la talla inmortal de Isidro Ayora Cueva, Salvador Bustamante Celi, Pio Jaramillo Alvarado, Benjamín Carrión, Ángel Felicísimo Rojas, Emiliano Ortega Espinoza, entre otros, quienes relumbraron con luz propia, dejando parte de su alma en los corredores, en las aulas, en las oficinas, en las canchas de nuestra institución. Todos ellos y muchos otros que se educaron o sirvieron en la “Miguel”, fueron a su debido tiempo, parte fundamental de la misma.
Su Directora actual, Rocío Salinas Poma, dice que hoy junto a la planta docente y estudiantes, no celebran el simple paso del tiempo, sino la heredad del espíritu laico, académico, intelectual y organizativo, que durante más de cien años, se ha afincado en todos quienes integran este plantel. Que que hoy tienen la responsabilidad de potenciar el prestigio institucional, pero que para ello, es necesario el apoyo gubernamental a las necesidades de infraestructura para poder ofrecer educación de calidad a cerca de dos mil estudiantes.

viernes, 5 de mayo de 2017

La educación debe ubicar las causas de la crisis social


Parecería una vez más, que el análisis del sistema educativo se diluyera con la propagandización de algunos elementos del mismo, como las unidades del milenio, los textos escolares o la colación escolar, y el endilgar la crisis a la UNE.
El gobierno no quiere entender que los problemas sociopolíticos también llegan a las aulas y al proceso de enseñanza aprendizaje. La tecnocracia revolucionaria considera que desde la parte posterior de un escritorio se puede disponer que la educación mejore su calidad; y no propone un verdadero dialogo entre los actores educativos, a fin de propiciar el cambio pedagógico que hoy necesita la educación ecuatoriana.
Se machaca una y otra vez con la evaluación estandarizada a docentes y estudiantes, sin que los resultados nos conduzcan a un mayor éxito educativo, que a su vez conlleve a la formación de una sociedad más habitable, más equitativa y más solidaria; como tampoco estos resultados ayudan a encontrar los medios para que la escuela y los docentes recuperen su rol y prestigio.
Los cambios curriculares y la propuesta de desarrollo de destrezas con criterios de desempeño, es puro cuento, en la práctica, se dispone una educación libresca, memorística que deja de lado la creatividad, el desarrollo del pensamiento crítico, el trabajo en equipo que no es lo mismo que trabajo grupal. Los docentes casi son obligados a transmitir contenidos, pues a pesar de la exigencia de micro planificaciones, cada docente aplica su “mejor método” y no la propuesta pedagógica y metodológica institucional.
Parafraseando frases de Fidel Castro, de las que me hago responsable: en la educación ecuatoriana se sigue enseñando los accidentes y fallas de la naturaleza, pero no se enseña los tremendos accidentes sociales ni las fallas de la sociedad humana, porque en las escuelas, y sobre todo en las escuelas pagadas, se le oculta a la niñez y adolescencia, la verdad humana y la realidad social de nuestro pueblo.
En cuanto a la organización gremial y a los propios docentes, el electo presidente junto a los nuevos funcionarios del mismo gobierno, deben parar la persecución, la inmovilización y el afán de desvincularlos de la lucha social y popular. Mantener ese odio visceral del régimen correísta, solo contribuye a que el maestro pierda la posibilidad de ubicar las causas de la crisis social, convirtiéndolo en un ente pasivo con ceguera política que no contribuye a la transformación radical del Estado.

miércoles, 3 de mayo de 2017

“Si la educación retrocede, retrocede el país”

Entrevista a Rosana Palacios, 
Presidenta Nacional de la UNE
(Semanario En Marcha, Ecuador)

La UNE tiene la propuesta de la pedagogía para la Emancipación, que las aulas sean el espacio donde se discuta y debata la realidad concreta y se le dé una salida de justicia y libertad para los pueblos.

lunes, 1 de mayo de 2017

Un Primero de Mayo de reivindicación para el pueblo y los trabajadores


El 1 de Mayo es una fecha de heroísmo que recuerda el sacrificio de los obreros de Chicago, quienes fueron ejecutados en Estados Unidos por demandar la reducción del horario laboral a ocho horas y el mejoramiento de las condiciones de trabajo.
La historia de esta fecha es conocida por todos. Sin embargo, vale recordar que a partir de este vil asesinato colectivo en 1886, se forjó la unidad de la clase obrera en su afán de enfrentar la arremetida de la burguesía criolla e internacional en todos los pueblos del mundo.

En nuestro país con motivo de los 100 años del Primer Grito de Independencia, el 10 de agosto de 1909, los trabajadores fundan sus primeras organizaciones. Relata la historia del movimiento obrero que en 1911, la “Asociación de Abastecedores del Mercado de Guayaquil”, conmemoraron por primera vez, el Primero de Mayo, acontecimiento que los trabajadores ecuatorianos continúan recordando hasta la presente fecha, no solo para reclamar sus reivindicaciones a las clases concentradoras del poder económico, sino ante todo, para demandar el respeto de sus derechos y libertades constitucionales, a ellos y a los gobiernos de turno.
Recordemos que en el año 2007, el pueblo y los trabajadores ecuatorianos respaldaron al Presidente Correa, cifrando sus esperanzas de que tras un periodo de inestabilidad política e inflación económica, creyeron que la revolución ciudadana traería mejoras para las clases trabajadoras y populares del país. Esas esperanzas no se han cumplido, debido no tanto a la crisis económica que efectivamente golpeo al país, como por la prepotencia y persecución a los trabajadores y dirigencia sindical.
El pueblo y los trabajadores reconocen que en el campo social ha habido ciertos avances; sin embargo, estos contrastan con el evidente retroceso de los derechos y conquistas laborales y la libertad de expresión garantizados en la Constitución del 2008, pero echados al traste con decretos que permiten la tercerización, el despido de los trabajadores e impiden la organización sindical.
En fin…, este Primero de Mayo corresponde a los trabajadores y al pueblo, levantar la bandera de la unidad y lucha popular en homenaje a los obreros guayaquileños masacrados el 15 de noviembre de 1922, para así enfrentar la división impuesta por el oficialismo y exigir el cumplimiento de las ofertas de campaña, las mismas que el presidente electo, ya ha adelantado la imposibilidad de cumplirlas.