domingo, 8 de mayo de 2022

Día de la Madre, militancia por la vida

 Hay veces que la casualidad y la voluntad, puede dar aliento y testimonio de la lucha personal y colectiva de la Madres que, atrapadas en el manto burgués levantan su voz para ser parte ineludible del escenario de la protesta social en defensa de los derechos humanos. Sin embargo, la historia de cada Madre en la participación social no comienza ni termina en una marcha popular. Su historia, que es la de muchas Madres, se conjuga día a día, en el combate por la sobrevivencia y en contra de las imposiciones laborales y político-sociales del sistema.

Es preciso recordar que, en 1870 la escritora estadounidense Julia Ward convocó a todas las mujeres a rebelarse contra la opresión, en una desgarradora proclama pacifista por el día de las madres:

“¡Levántense, madres y mujeres de hoy! ¡Levántense todas las que tienen corazones, sin importar que su bautismo haya sido de agua o de lágrimas! Digan con firmeza: No permitiremos que nuestros maridos no regresen a nosotras en busca de caricias y aplausos, apestando a matanzas. No se llevarán a nuestros hijos para que desaprendan lo que les hemos
enseñado acerca de la solidaridad y el patriotismo. La sangre no limpia el deshonor, ni la violencia es señal de posesión.”

Esta proclama mantiene su vigencia, a pesar de que las reacciones conservadoras lograran convertir aquella propuesta en una celebración comercial, que se ha generalizado en buena parte del mundo:

Desde el gobierno y las élites, este domingo dirán “Feliz día de la Madre”, lo dirán con hipócrita solemnidad como si realizaran una proeza, pero no, no es así. Hace falta reconocer lo mucho que le debemos a quien nos dio la vida, para desearle algo más que un feliz día.

La mayoría de la Madres, mantienen a sus hijos en el lumbral de la miseria, sin perspectivas de un futuro pleno por la falta de fuentes de trabajo, por la desatención en los servicios de salud, por la disminución del presupuesto para la educación y un sin número de etcéteras de penurias producto de los infinitos actos de corrupción oficial y de la bajeza humana de los gobernantes de turno que postergan las esperanzas del pueblo en su búsqueda de mejores condiciones de vida.

Feliz día de la Madre, niña-mujer, que ignoras tus derechos porque nunca te los contaron. Feliz día también para ti Madre-abuela que asumes el drama de la responsabilidad ajena y que no te rebelas porque ni siquiera conoces la dimensión de la injusticia. Feliz día Madre-marginada por un Estado inclemente a tus necesidades.

Feliz día Madres-maestras cuyo día se inicia desde el amanecer ante las puertas de escuelas y aulas aferrándose a educar para la libertad, para la emancipación. Feliz día Madres-luchadoras, te saludo por heroína, sencilla y altanera, porque luchas por un mundo mejor, porque crees que la Patria Nueva si es posible.

La manos de mi Madre 

sábado, 30 de abril de 2022

Primero de Mayo: “A la felicidad del obrero se va por la felicidad de la patria”

 Este Primero de Mayo, me viene a la memoria la conceptualización de democracia burguesa que describe el canta autor chileno Ángel Parra: “La democracia es linda… permite que el pobre y el rico de igual a igual tengan los mismos derechos cuando llaman a votar… permite apreciar el arrollador avance del que tiene libertad para exprimir a unos cuantos y aumentar su capital”.

El Primero de Mayo es una fecha que recuerda el sacrificio de los obreros explotados por el capitalismo en todos los pueblos del mundo. A los obreros ejecutados en Chicago, por demandar la reducción del horario laboral a ocho horas y el mejoramiento de las condiciones de trabajo. A los obreros y trabajadores que derrotaron el “zarismo ruso” en 1917. La gesta heroica del proletariado guayaquileño masacrado y arrojado al Rio Guayas el 15 de noviembre de 1922. A los trabajadores del Ingenio Azucarero Aztra, que por exigir el cumplimiento del contrato colectivo fueron asesinados en octubre de 1977. Al pueblo que a diario en su afán de sobrevivencia, enfrenta una lucha encarnizada contra el Estado neoliberal.

Esta fecha también nos recuerda el surgimiento, avance y división del movimiento obrero ecuatoriano. En 1938, auspiciada por la iglesia, se funda la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Católicas CEDOC. En 1945 al calor de la “Gloriosa de Mayo” y patrocinada por el Partido Comunista surge la Confederación de Trabajadores del Ecuador CTE. En 1962 nace la Confederación Ecuatoriana de Organizaciones Sindicales Libres CEOSL organización vinculada directamente a la CIA. En 1981 surge el Frente Unitario de Trabajadores FUT. En el año 1982 aparece la Unión General de Trabajadores del Ecuador UGTE. Por último, el Presidente Correa, en el año 2014 funda la Central Única de Trabajadores CUT, que agrupa a organizaciones serviles al gobierno con el objetivo de pisotear los derechos y conquistas laborales, la libertad de expresión, boicotear las reivindicaciones sociales y la lucha y protesta popular.

La ambición de las élites, los banqueros, los empresarios especuladores y no pocos funcionarios corruptos que se afanan por seguir acumulando riquezas y poder a costa de los esfuerzos de los trabajadores, es bloquear la organización popular y postergar el interés de los obreros, los trabajadores y los pueblos imponiéndonos un interés ajeno a nosotros. De ahí, que nos corresponde, luchar por lograr la unidad política y social de la clase obrera y por romper la enajenación y alienación social.

Este Primero de Mayo, como un homenaje a los trabajadores, tenemos el deber de continuar y desplegar todo el heroísmo de los que lucharon en el pasado para vencer la pobreza, la miseria y el sufrimiento. Nadie debería rehuir a esta batalla, porque como dice José Martí: “a la felicidad del obrero se va por la felicidad de la patria” y porque luchar o luchar, es la única oportunidad de futuro que tenemos.

sábado, 23 de abril de 2022

Explotación exacerbada elimina conquistas y derechos

   
 En su mayoría el mundo está dominado por el capitalismo, los gobernantes de turno se han sometido a la oligarquía criolla e internacional y han maniatado al Ecuador a la voracidad de la corrupción como única figura de administración pública. Así gobiernan, reducen los impuestos e incluso se perdona intereses y multas a los grandes empresarios y banqueros, se concentra la riqueza en pocas manos a costa de mayores desigualdades y pobreza.

En este contexto vergonzoso cada cuatro años se escenifica una representación política embustera, cuyo sistema judicial da paso libre a los delincuentes de cuello blanco, que claros como el “vidrio”, embuten a las grandes empresas los dineros del erario nacional y que como vulgares terroristas atentan contra la vida de las mayorías populares quitándoles el pan de cada día. Estos gobernantes representan las dos caras de la misma moneda, las del capitalismo depredador.

Esta realidad será así hasta que el pueblo tome las riendas de su destino y, en base a la unidad y organización despliegue la lucha para acabar con el sometimiento al FMI, al Banco Mundial, a la burguesía nacional y a sus siervos. No podemos seguir maldiciendo los actos de corrupción, tenemos que luchar contra ellos y el Estado corrupto que sin un gramo de vergüenza flamean la bandera tricolor en lo más alto de Carondelet y de todas las instituciones del “Estado fallido”. Mientras que, a los trabajadores, campesinos, amas de casa, maestros y estudiantes, para defender los derechos constitucionales y por mejores condiciones de vida, les toca continuar agitando por calles y plazas las banderas rojas de la libertad, porque si no lo hacen, están condenados a heredar la pobreza, la precariedad y las desigualdades.

Desde el dos mil ocho hasta la presente fecha, el capitalismo enmascarado de revolución ciudadana y la derecha populista disfrazada con zapatos rojos, en una especie de poder dictatorial y señorial respectivamente, saquean los recursos del subsuelo con el modelo extractivista que destruye la naturaleza, que provoca enfermedades y muerte. Con esta lógica de explotación exacerbada y con el objetivo de seguir aumentando las ganancias de los grupos de poder, nos vienen arrancado las conquistas obreras y populares, eliminando derechos, flexibilizando el mercado de trabajo, vendiendo las empresas públicas, encareciendo la canasta familiar, judicializando la protesta popular, etc., etc.

Necesitamos que la indolencia y el conformismo social no cale en los sectores populares, que el miedo a la persecución al que nos sometieron Rafael Correa, Lenin Moreno, Jorge Glass, María Alejandra Vicuña, Otto Sonnenholzner, María Alejandra Muñoz y la desnaturalizada María Paula Romo, no nos siga asaltando. Hay que darle batalla al sectarismo y al individualismo. Que el distanciamiento obligado por la pandemia no se instale como una ley, por el contrario que sirva para elevar la conciencia de clase, la unidad y lucha que hemos sabido construir como pueblo.