miércoles, 1 de mayo de 2013

Día del Trabajo: fecha para reafirmar la lucha por la auténtica libertad

"Este no es un día de fiesta, sino un día de conmemoración y lucha, es un día para mirar atras y rendir un homenaje a todos aquellos que cayeron luchando por hacer más digna la vida del hombre y conquistar la auténtica libertad"   Salvador Allende

Sin embargo, hay quienes se hacen eco de que este es "un día de fiesta" y olvidan a los Mártires de Chicago que cayeron luego de una huelga general preparada con anterioridad para el 1 de mayo de 1886, olvidan también que en nuestro país, en noviembre de 1922 cientos de trabajadores fueron asesinados y arrojados al río Guayas, y que en octubre de 1977 en el ingenio azucarero Aztra, fueron masacrados por defender sus derechos y luchar por hacer de nuestra tierra una nación socialmente justa y políticamente soberana.

Este 1 de mayo encuentra a los trabajadores con sus organizaciones debilitadas en su poder de convocatoria no así en su unidad y lucha si antes se hablaba de división como el mal mayor de los gremios, hoy la debilidad de un sector de los trabajadores se evidencia en su pasividad y obediencia para salir a marchar en respaldo del gobierno nacional. Otro sector intermedio muestra su temor e indiferencia haciéndole el juego al sistema, unos y otros esperan que los patronos por decreto les digan cuando pueden protestar o exigir sus derechos. Desde luego, están los trabajadores convencidos que el sistema capitalista ahonda la lucha de clases, estos son quienes, a pesar de la represión oficial y la criminalización de la protesta social, cierran filas en sus gremios y batallan por la unidad popular, por la solidaridad, por las reivindicaciones sociales y la construcción de la Patria Nueva.

Es necesario tener en cuenta que al igual que a los obreros de Chicago, hoy a los trabajadores, maestros, estudiantes, campesinos e indígenas se les acusa de terroristas o de querer desestabilizar el país, esa práctica de la represión es la fiel réplica neoliberal para coactar la acción popular contra la corrupción, para acallar a quienes exigen que se reduzca la brecha de desigualdad social entre los que nacen con el pan en la boca y con un puesto de trabajo, mientras la gran mayoría del pueblo se muere de hambre por la falta de fuentes de trabajo.

En fin, en todo el mundo al igual que en Ecuador, pueblos y obreros recuerdan la gesta de Chicago con demandas laborales y puños en alto en rechazo a las políticas neoliberales y del decadente sistema capitalista, con seguridad se enarbolarán las banderas de la dignidad, la paz, la hermandad de los pueblos y la justicia social. Desfilaran protestando contra las medidas que nos imponen el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, contra la intromisión en la libre determinación de los pueblos y formas de gobierno.