Los ecuatorianos a veces somos muy críticos señalando fallas y errores, pero la mayoría de las veces no queremos involucrarnos en denunciar esos hechos, quizá por los riesgos que representa hoy en día la corrupción oficial aliada a la delincuencia organizada que ha sembrado el más brutal y sangriento miedo que haya conocido nuestro país.
Con fuerza y sin temores deberíamos exigir que se sancione con severidad todo tipo de corrupción venga de donde venga. Por ejemplo, la evasión de impuestos de la clase empresarial que perjudica al fisco y explota a los trabajadores, saquea la naturaleza, acumulando fortunas sobre la sangre, sudor y lágrimas de las mayorías populares.
Cuando los fariseos maliciosamente preguntaron a Jesús, acerca de si era justo pagar los impuestos al emperador romano. Él les contestó: "Dad al César lo que es del César y a Dios lo que es de Dios". En estos días de mentiras y proselitismo electoral, el pueblo parafrasea "dad al César lo que es del César” y al entorno familiar y empresarial de Daniel Noboa, que le cobren los millones de dólares que por impuestos deben al SRI, cuyos intereses han sido perdonados con la complicidad de la mayoría de asambleístas.
En el perverso sistema capitalista, la educación, la vivienda y la salud, son tratadas como mercancías, todo es rentable. Para los empresarios que son quienes manejan y controlan los gobiernos y los medios de comunicación, un niño que asiste a la escuela, es un ciudadano menos a quien engañar; un enfermo que se sana es un cliente que pierden; un techo para una familia, significa un chulco eterno. Para estos mercaderes, resulta provechoso tener a millones de personas encadenadas a la pobreza; y esa lógica capitalista explica la ausencia casi absoluta de políticas públicas en beneficio de todos.
Unidad Popular recogiendo el clamor de varias organizaciones gremiales, entre ellas la UNE, ha planteado para las elecciones 2025 la candidatura a la Presidencia del Ecuador, al Profesor Jorge Escala Zambrano, un maestro combatiente, un líder popular, leal y honesto, consecuente defensor de los derechos de todo el pueblo; siempre ha estado desenmascarando a la rapaz oligarquía.
En un gobierno de la Unidad Popular y de los trabajadores, encabezado por el profesor Jorge Escala Zambrano, todas las políticas públicas estarían concebidas para mejorar la calidad de vida de todo un pueblo; y no para que un puñado de multimillonarios incrementen sus fortunas, a costa del sacrificio de los más pobres.