viernes, 24 de noviembre de 2017

Alternativas para recuperar la democracia y la dignidad


El ex presidente Rafael Correa, ha anunciado que regresará al país tras seis meses de auto exilio en uno de los áticos belgas. Si lo hace, será en un momento de una paradójica revuelta de la fanaticada política al interior del movimiento que hace diez años lo llevó al poder.
El mashi o compañerito, -frase con la que él llamaba al traductor de las sabatinas- y en las que inicialmente se definió como un humanista, cristiano y de izquierda. Sin embargo, nada de eso lo marcó durante su mandato. Lo de humanista, estuvo manifiesto por la persecución y prepotencia contra la dirigencia sindical y sus organizaciones, al extremo de disminuir sus derechos vía decreto o por una represión silenciosa que llegaba incluso al encarcelamiento de todo aquel que se atrevía a desafiar su pensamiento.
Dijo que como “un verdadero cristiano” no permitirá la desigualdad social y económica de los ecuatorianos. Si bien realizó obra social en los sectores populares y que en el sector estratégico promovería el desarrollo y la industrialización, esta nunca llegó aunque si se acompañó de gran corrupción.
Lo de izquierda, solo fue propaganda. Hizo creer a los ecuatorianos que su gobierno se centrará en la equidad, la justicia y la supremacía del trabajo sobre el capital. Equidad en el reparto de los dineros del pueblo ecuatoriano entre el círculo verde flex. La justicia fue manipulada precisamente para proteger a sus cercanos colaboradores e imponer la dictocracia. Mientras que los capitales de préstamos chinos fueron para generar trabajo a empresas y trabajadores chinos, que aún siguen saqueando los recursos naturales especialmente los recursos mineros.
Ante los dimes y diretes entre el ex y actual mandatario, de los que sacará ventaja el Presidente Moreno, porque ejercer el poder es más milagroso que cualquier oración del muy cristiano Rafael Correa. Además, hay que tener presente, que desde Carondelet y la Asamblea Nacional, Ministros y Asambleístas no hacen más que entretenernos con chistecitos de mal gusto u oponiéndose a la fiscalización de los ex funcionarios.
Por eso, más allá de que venga o no Rafael Correa, los movimientos y organizaciones sociales y populares, como verdaderos protagonistas de las luchas por la vigencia de los derechos constitucionales y en contra de la pobreza, tienen la tarea ineludible de reafirmar la unidad y solidaridad para exigir al gobierno, alternativas que recuperen la democracia y la dignidad.

viernes, 17 de noviembre de 2017

Mejorar en la convivencia escolar para evitar bullying y acoso sexual


Las aulas y patios escolares deberían ser espacios seguros para todos, sin embargo no lo son. Hay niños y niñas que sufren maltrato físico, psicológico y hasta violencia sexual por parte de compañeros y adultos.
Las recientes denuncias de acoso y violencia sexual en escuelas y colegios, permitieron conocer un secreto a voces, una especie de pacto silencioso con el miedo al abuso de poder o un silencio que ha marcado la vida de la niñez y adolescencia, sin que como sociedad nos conmovamos.
Un amigo docente me refiere que “dos niños de trece años le tocaron las nalgas a una niña de doce años mientras le obligaban a mirar una revista porno…” Que este caso fue denunciado al interior del plantel y no se hizo nada”. Refería además, que cuando suceden casos de bullying y acoso sexual, son las propias niñas las que se reconfortan entre ellas o por sus compañeras, con frases como “nosotras hemos soportado peores abusos por mucho más tiempo”.
Hay que reconocer que los Departamentos de Consejería Escolar hacen su trabajo, pero también hay que expresar que los resultados no son alentadores, que las agresiones físicas y el acoso sexual no han disminuido, sigue allí. En una oportunidad, mientras trabajaba un taller de convivencia escolar, las madres de los alumnos varones justificaban que “las niñas son unas adelantadas y que son ellas las que los provocan, que no se hacen a respetar, que a esa edad es natural la curiosidad sexual”.
Me pregunto, qué es hacerse respetar. Acaso es que sean obedientes, que no griten o no jueguen como los varones, etc. de bobadas. Nadie debería esforzarse por obtener un trato decoroso, el respeto es un principio fundamental. Las niñas y en general la niñez debe ser respetada por el sólo hecho de ser seres humanos.
A todo esto hay que sumar, el entorno que rodea en el vecindario, durante el camino a la escuela, y dentro de la escuela. Un entorno donde sus propios compañeros, conserjes, profesores y otros adultos les murmuran obscenidades a voz en cuello y hasta manoseos indeseables que debilitan su autoestima.
Buena parte de responsabilidad corresponde a la escuela. Por ello, es obligatorio mejorar la convivencia escolar. ¿Cómo? Comenzando a dialogar, a discutir a informar y construir conocimiento y pensamiento crítico respecto de sí mismas, de sí mismo y de la realidad nacional.

viernes, 10 de noviembre de 2017

Mentes lúcidas y manos ardientes


La expresión señalada y un poco parafraseada de la consigna correísta, refleja la realidad de asambleístas, funcionarios públicos y de los adherentes de movimiento país, o quizá solo de los apasionados por el caudillo.
Ayer el llamado al dialogo con los diversos sectores sociales que realizó el Presidente Moreno, provocó histeria en la dirigencia verdeagüita, éstos declararon de manera pública su contrariedad llegando a separarlo de la presidencia de su movimiento. Al pasar de los días, y ante el apoyo de la oposición y de los sectores populares a la consulta popular, se produjo el fraccionamiento de los asambleístas; confirmando eso de mentes lúcidas y lo milagroso que es el poder, porque asambleístas y funcionarios públicos comenzaron su migración al lado morenista.
En estos momentos se puede afirmar, que ya casi nadie es correísta, que ya nadie defiende la década ganada. O quizá nos están tomando del pelo, entreteniéndonos con el sainete de la división, porque ahora María José Carrión respalda a quien decía era “un traidor”. Mientras Moreno pone las manos al fuego por Richard Espinoza al que los trabajadores acusan del caos en el IESS.
Lo cierto es que, el bienestar del pueblo ecuatoriano, aunque parezca risible, no depende de la obra que haga o deje de hacer el actual gobierno, acaso si de lo que pueda suceder con el posible juicio político a Jorge Glas, juicio que a su vez tampoco depende de las causales o evidencias en su contra, sino que la destitución del vicepresidente estriba más de los acuerdos políticos para contar con los votos suficientes para tal efecto, y por supuesto que dentro de esas negociaciones, estará también consensuar entre comillas al reemplazo de Glass; para ello, los sectores sociales deberían exigir a Moreno y a la Asamblea que quien sustituya a Glass debe ser una persona ajena a los correístas y de a aquellos que se dicen independientes o apolíticos; allí debe ir alguien con un claro compromiso popular que contribuya a borrar la “dictadura disfrazada de democracia”.
Finalmente, agrupaciones políticas ideológicamente opuestas, coinciden que votaran “7 veces sí” en la consulta popular, pero expresan su temor, manifestando que de ninguna manera es un cheque en blanco en favor del presidente Moreno, por lo que se debe no solamente aprovechar el apoyo que recibe de las organizaciones sociales y políticas, sino ante todo, analizar de dónde viene ese apoyo y que intereses esconde.